Puro sabor a marisco: ¿cómo hacer langostinos o gambas en tempura?
¿Te llama la atención la comida oriental pero no te hace gracia lo crudo? No te preocupes, hay un montón de preparaciones que puedes hacer con marisco y que quedan buenísimas sin tener que ingerir los productos crudos.
Uno de los ejemplos más populares es el de los langostinos en tempura, un bocado que resulta delicioso a los más grandes y también a los más pequeños. Te damos consejos para que quede crujiente y dorada.
¿Cómo hacer los langostinos en tempura?
Para empezar a elaborar unos buenos langostinos o gambas en tempura, lo que vamos a hacer será pelar los langostinos retirando las cabezas y caparazones, pero dejando el final de la cola.
Luego, hacemos una pequeña incisión en la carne por la parte de arriba para poder sacar fácilmente el cordón de dentro y que nos quede un resultado perfecto.
De esta forma, por el otro lado (la parte de las patas) también podemos hacer unos pequeños cortes. Los salpimentamos al gusto y los dejamos retirados para preparar la masa. En un bol, vamos a poner 140 gramos de harina de tempura con agua. Ambas deben estar muy frías. La cantidad de agua que vamos a añadir dependerá de la harina, e iremos introduciéndola poco a poco para que no se formen grumos hasta que tengamos una masa suave como si fuera para tortitas.
Una vez hecho esto, ponemos una sartén con aceite suave y lo calentamos. Cuando consigamos la temperatura perfecta (cuidado de que no humee), bañaremos cada langostino en harina, luego lo pasaremos por la masa y lo introduciremos directamente a freír. De esta forma la masa quedará fina y crujiente, deliciosa.
Esta receta se puede acompañar con salsa de soja a la que podemos añadir un poco de jengibre si nos gustan los toques picantes. Además, si queremos acompañar nuestros langostinos y gambas con una guarnición podemos realizar el mismo proceso con unas verduras.
Escribe tu comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Agradecemos tu participación.